Bienvenidos al Titanic, los violinistas siguen tocando
El mundo colapsa en silencio: democracias huecas, IA infiltrada, planeta exhausto. No hay redención, solo urgencia de resistir sin cinismo mientras todo parece venirse abajo.
La IA: El oráculo imperfecto
Hay días en que la inteligencia artificial no parece herramienta, sino huésped intruso: reescribe rutinas, ocupa espacios, consuela, crea, evalúa… y nunca pidió permiso.
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